Critican a policía por allanar redacción de un periódico en Kansas

Critican a policía por allanar redacción de un periódico en Kansas

La última edición del periódico Marion County Record en un estanquillo el 13 de agosto de 2023.

 

Más de 30 medios de comunicación y organizaciones de libertad de prensa condenaron una redada policial en un periódico del estado norteamericano de Kansas.

Por vozdeamerica.com





Una carta conjunta publicada el domingo dijo que parecía que “no había justificación” para una búsqueda tan intrusiva en un medio de comunicación estadounidense.

La policía del condado de Marion confiscó el viernes dispositivos y otros materiales durante una redada en la oficina del periódico Marion County Record y registró la casa del editor de la publicación.

Marion es una ciudad en Kansas, de unos 1.900 habitantes, a unos 241 kilómetros de Kansas City, en Missouri. El periódico se publica una vez por semana.

En un informe publicado por el Marion County Record, el periódico dijo que la policía se incautó computadoras, teléfonos, un servidor y los teléfonos celulares personales de los empleados, acatando una orden de allanamiento.

La casa del editor Eric Meyer fue sometida a un registro y la policía se llevó computadoras, un teléfono y el enrutador de internet de la vivienda. La madre de Meyer, Joan Meyer, de 98 años, quien era copropietaria de periódico y vivía en la misma dirección, colapsó y falleció el sábado, reportó la agencia AP.

Eric Meyer culpó al estrés del allanamiento de la casa por la muerte de su madre.

“Este es el tipo de acciones que hace (el presidente ruso) Vladimir Putin, que hacen los dictadores del Tercer Mundo”, denunció Meyer en una entrevista de AP. “Eso son tácticas de la Gestapo en la Segunda Guerra Mundial”.

Una carta conjunta del Comité de Reporteros para la Libertad de Prensa y otras 34 organizaciones de noticias enviada el domingo al jefe de policía del condado de Marion cuestionó la legalidad de la redada.

La carta decía que, según una copia de la orden de allanamiento, los informes y las declaraciones públicas de la policía, “no parece haber justificación para la amplitud y la actitud intrusiva del allanamiento”.

“Los registros e incautaciones en las salas de redacción se encuentran entre las acciones más intrusivas que las fuerzas del orden público pueden tomar con respecto a la libertad de prensa, y las más potencialmente represivas a la libertad de expresión de la prensa y el público”, decía la carta.

En un reporte publicado en el periódico, Meyer dijo que cree que la redada fue provocada por una historia publicada la semana pasada sobre el dueño de un restaurante.ó

Gideon Cody, el jefe de policía, defendió la redada el domingo en un correo electrónico a la AP y dijo que la ley federal generalmente requiere una citación judicial, no solo una orden de registro, para allanar una sala de redacción, pero que hay una excepción “cuando hay razón para hacerlo cuando se cree que el periodista está participando en el delito subyacente”.

El correo electrónico no aclaró cuál fue la supuesta irregularidad.

Reporteros sin Fronteras dijo en un comunicado el domingo que los detalles de la orden de allanamiento “no se acercan a justificar esta infracción generalizada contra un periódico local”.

“Los medios de comunicación no pueden hacer su trabajo si tienen que temer una redada policial cada vez que reciben información de las fuentes”, dijo Clayton Weimers, director de la Oficina de EEUU de Reporteros sin Fronteras.

Meyer dijo que el periódico planea demandar al departamento de policía y posiblemente a otros, calificando la redada como una violación inconstitucional de la garantía de libertad de prensa de la Primera Enmienda.

Las redadas en las salas de redacción de EEUU son raras, pero datos de US Press Freedom Tracker muestran nueve órdenes de registro obtenidas para acceder a los dispositivos de los periodistas desde que el rastreador comenzó a documentar casos hace seis años.

Esa entidad rastreadora ha documentado 194 casos de citaciones u órdenes de captura de registros de periodistas o sus fuentes confidenciales, durante el mismo período.