Al menos 50 operaciones de comercio internacional se han registrado por la frontera de Táchira desde el #26Sep

Insumos para fabricar calzados, mercancías de importación. Foto: Corresponsalía La Patilla

 

 

 





 

Hasta este lunes se habían registrado 44 operaciones de comercio internacional por los pasos binacionales que unen a Táchira con Norte de Santander, luego de la reanudación de relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela desde el pasado 26 de septiembre, cifra que ha incrementado en las últimas horas.

Luz Dary Depablos // Corresponsalía lapatilla.com

Nelson Urueña, presidente de la Asociación de Aduaneros en el estado Táchira (Asoata), informó que “los primeros alimentos deberían estar entrando formalmente la próxima semana” (por los puentes internacionales de Táchira), si logran convencer a los empresarios tradicionales que migraron hace más de cuatro años a pasar mercancías por Paraguachón, estado Zulia.

“En un principio se pensó que sería fácil captar los clientes de Paraguachón, pero no ha sido fácil, cada quien cuida su territorio y los funcionarios de las aduanas de allá están ofreciendo facilidades con las que ahora se debe competir”, enfatizó Urueña.

En los últimos días se ha evidenciado desabastecimiento de alimentos colombianos en anaqueles de toda Venezuela, por lo que el presidente de Asoata precisó que “se quiere hacer creer que el desabastecimiento es culpa del sector aduanero”, pero la realidad es que “muchos de los operadores que ingresaban (alimentos) por los caminos verdes no cuentan con permisos”.

Estos permisos sanitarios no son impuestos por un grupo de operadores o funcionarios, son normativas establecidas por la Organización Mundial de la Salud y la Organización Mundial de Comercio, que se requieren para el trato adecuado de alimentos para humanos y animales, así como para insumos de higiene personal.

Contrabando apoyado por el chavismo

Cabe destacar que desde la gestión de José Vielma Mora como gobernador de Táchira, entre 2016 y 2017, comenzó a romperse la formalidad para el paso de mercancías con la creación de mercados populares en los Pabellones Colombia y Venezuela (galpones para uso para exposiciones en San Cristóbal), donde vendían alimentos colombianos que eran traídos por contrabando con el argumento de “contrarrestar la escasez”.

Esta situación se agravó con la creación del “código trocha o código del Protectorado”, cuando comenzaron a ingresar toneladas de alimentos por los pasos ilegales, sin ningún tipo de control sanitario que, por fortuna, no ocasionó ninguna enfermedad en la población, pues los alimentos tanto para humanos como para animales, no cumplían con el tratamiento adecuado.

Almacenadora en San Antonio del Táchira
Foto: Corresponsalía La Patilla

 

 

 

 

 

Además, este tipo de acciones ilegales también generaron desconfianza entre los empresarios tradicionales, por lo que representantes del gremio aduanero de los municipios fronterizos de Táchira señalan que han estado en conversaciones con empresarios de grandes compañías.

“Hemos contactado a empresarios de trasnacionales que importan alimentos para animales y alimentos para el consumo humano, que son quienes cuentan con todos los permisos sanitarios y cumplen con las normativas que exige el comercio internacional”, puntualizó Nelson Urueña.

Normas para importar

Urueña indicó que cerca de 200 nuevos empresarios han mostrado interés por importar alimentos y otros rubros, pero aún no cuentan con los permisos sanitarios, debido a que la mayoría de ellos en los últimos años habían pasado mercancías a través de los pasos ilegales, donde solo se pagaba una comisión por tener el “Código trocha o código del protectorado”, que les permitía el ingreso y distribución de mercancías por todo el país, sin ningún control sanitario.

Asimismo, manifestó “que se está demorando, sí, es cierto, pero ya sabemos que la informalidad se hizo una costumbre y muchas de esas empresas no estaban cumpliendo con la norma”.

“Esta frontera definitivamente se abrió de manera comercial, aquí no volverán a existir trochas. La gente debe acostumbrarse a las normas, que es un proceso necesario para poder traer mercancías a este país. No es que son normas que se impongan, no, es que están establecidas en la ley”, destacó el presidente de Asoata.

También mencionó que será difícil recuperar el intercambio que se logró en tiempos de bonanza por esta frontera, pues recordó que los últimos siete años de cierre intermitente de los pasos formales ha dejado una recesión, la cual ha afectado el funcionamiento de grandes compañías tales como Ford, Chevrolet y otras empresas que han cerrado. “Todo se paralizó, todo ese volumen se movía por esta frontera”.

En las operaciones normales, el promedio era de 120 o 140 vehículos de carga pesada en un día. Incluso, en los años de mayor movimiento de operaciones comerciales, se llegó a contar con el paso de hasta 300 unidades diariamente, solo por importación.

Sin embargo, apuestan para que a partir del primer trimestre del año 2023 se logre un movimiento de unas 200 unidades de transporte de carga pesada semanalmente.