Desde el Terminal La Bandera, Lisbeth Cordero, miembro de la Mesa de la Unidad Democrática – Caracas, denunció ciertas irregularidades que ha venido cometiendo la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) con los pasajeros que se dirigen al interior del país, entre la que destacó el decomiso de insumos de higiene personal, alimentos y medicinas.
“Estamos preocupados por ciertas actuaciones de la Guardia Nacional porque a partir de la próxima semana las personas comenzarán a viajar al interior del país para compartir con su familia en esta época decembrina y nos encontramos con que funcionarios de la GNB, tanto en terminales como en carreteras, están decomisando todo tipo de cosas a los viajeros, específicamente insumos de aseo personal, comida y medicinas”, señaló Cordero.
Recalcó que esta situación se viene denunciando desde hace tiempo, ya que los mencionados funcionarios alegan que los ciudadanos que llevan ciertas mercancías son “bachaqueros”. “Resulta que estamos viviendo un problema de desabastecimiento y escasez, donde hay que hacer largas colas para conseguir ciertos productos y el problema se agudiza en el interior. Es por eso que viajamos con harina de maíz, champú, desodorante y medicinas para llevarle a los nuestros”.
En tal sentido Lisbeth Cordero hizo un llamado al Comandante General de la Guardia Nacional y a la Ministra de Interior de Justicia y Paz, para que señalen en qué resolución dice que “bachaquear y contrabandear” implica llevar encima dos kilos de harina de maíz o dos latas de sardinas que no se consiguen en los pueblos de Venezuela.
“Igualmente nos preguntamos ¿Qué hace la GN con los productos que decomisa al pueblo? Por eso le hacemos un llamado a la Gobierno Nacional para que garantice las ‘Navidades Felices’ que tanto pregonan y para eso tiene que haber una disposición que prohíba a la Guardia Nacional el decomiso de pequeñas cantidades de comida o artículos de primera necesidad que los pasajeros llevan en autobuses o en sus carros particulares”.
Agregó que el otro problema es que las bodegas, quincallas o surtidores de ciertos insumos en el interior del país, no tienen nada que ofrecer, por lo tanto los dueños de estos establecimientos se dirigen a Caracas para surtir su pequeño negocio y la GNB se los decomisa. “Estamos condenados a pasar trabajo, pasar hambre y lamentablemente esta situación que se está viviendo en la capital se acentúa con mayor fuerza en el resto del país donde no se consigue comida, artículos de higiene ni medicamentos”.
Dejó claro que, “Los venezolanos no somos contrabandistas ni somos bachaqueros, somos gente pobre que sólo queremos pasar las navidades con nuestras familias, por eso estamos haciendo un esfuerzo para viajar al interior del país y poderles llevar a nuestros familiares insumos que no se consiguen en los distintos pueblos de Venezuela”.
Finalmente informó que van a llevar la denuncia formal ante la Guardia Nacional Bolivariana, porque son sus funcionarios quienes están cometiendo estas irregularidades. Juan José Ojeda Díaz / Prensa de Solidaridad